Salvatore desea vivir con sus padres, que trabajan y viven en Roma. Él vive en una granja en Faxilde rodeado de toda especie de cachorritos, como él. Su conejo Miguel es su mejor compañero. Cuando sea mayor, será veterinario ´planetario´ pero antes tiene que resolver un problema con un pañal volador, que entra en su habitación cada noche y se mete dentro de su pijama sin pedirle permiso.