En la opinión de esta autora, las verdades más profundas pueden ser perfectamente comprendidas por toda persona mayor de diez años y de mediana inteligencia, siempre que le sean presentadas en lenguaje sencillo y en una forma que pueda aplicar a su vida diaria. Los tratados de Filosofía y Metafísica contienen un tesoro de enseñanzas para el logro de una vida próspera, feliz y asegurada contra todos los males corrientes que aquejan al ser humano, pero la fraseología técnica está más allá de la comprensión de la persona común. Diríase que los grandes Pensadores y Maestros, lejos de sentir el deseo de compartir el tesoro con la mayoría, se esforzaron en ocultarlo tras de barricadas retóricas y jerigonzas especiales.