Las puertas del tiempo se han abierto y el ejército de las eternidades ha despertado, aunque ha sido dividido antes de salir del laberinto, gracias a las artes negras de Kor. Yaruf debe aprender a liderar un ejército, ganarse su respeto y ser el guía en la batalla. Pero no lo va a tener fácil: ha de enfrentarse al mundo de los humanos, sobreponerse a las derrotas, a las traiciones y a la locura. Yaruf ha salido del laberinto y, fuera de sus paredes, está más perdido que nunca. El destino de los minotauros estará en peligro hasta que él no se encuentre a sí mismo.