En 1898, cuando se publicó por primera vez el Dicciorio Médico de Bolsillo, Dorland (que entonces se titulaba The American Pocket Medical Dictiory), su misión fue la de ser un libro que, ´aunque de tamaño manejable, fuera lo suficientemente amplio y completo como para responder tanto a las necesidades de los médicos en ejercicio como al estudiante de medici´. Sus objetivos consistían en ´realizar la selección de términos más completa posible... el vocabulario estrictamente actualizado. Por necesidad, las definiciones de los términos son breves, pero se ha realizado un esfuerzo para que sean claras, adecuadas y pertinentes´. Este ha sido el objetivo que se ha mantenido durante 102 años, aunque hay que reconocer que el reto de ser, al mismo tiempo, compacto y exhaustivo es cada vez más difícil. A medida que aumentan los conocimientos, lo hace también el vocabulario, y el Dicciorio se encuentra actualmente en los límites de lo que puede denomirse ´libro de bolsillo´, al mismo tiempo que se ha intentado añadir, en cada nueva edición, el mayor número posible de la enorme cantidad de términos nuevos surgidos desde la edición anterior.