Esta novela, joya de la literatura mexicana, pretende dar una imagen fiel de los famosos bandidos llamados "Los Plateados" por los adornos de plata que cubrían su vestimenta y sillas de montar. La acción transcurre entre 1861 y 1863, años que fueron los más fructíferos para estos bandidos que, por la guerra civil, asolaban a todo el estado de Morelos.
En aquellos tiempos, los lugares en que operaban Los Plateados eran, Yautepec, Atlihuayán, Xantetelco y luego Xochimancas, hacienda antigua y en ruinas que utilizaron como refugio, Los Plateados destacaron por el plagio y el asalto a diligencias.
"El Zarco" es caracterizado como un hombre desalmado, sanguinario y cobarde que fue trabajador en los cañaverales del rumbo y que se dio al bandidaje por su temperamento.
Martín Sánchez Chagollán, perseguidor de Los Plateados, ranchero que su único motivo fue la venganza para querer exterminarlos.