Apoya los primeros movimientos destidos a la utilización del lápiz y papel, en estos ejercicios el niño de tres a cuatro años inicia, con movimientos libres de mano, a la ubicación de sus movimientos en u hoja de papel. Ejercita los trazos básicos para la coordición ojo-mano, en el dominio de su mano, es decir, en la obediencia que esta presta a las ordenes de su imagición y al apoyo que para dibujar le ofrece su vista. Por medio de estos ejercicios el niño, ya sea diestro o zurdo, aprende a discrimir los movimientos de su mano con orden entre derecha e izquierda, arriba y abajo. El dominio de estas habilidades es esencial para el posterior dominio de la letra escrita.