En distintos países del mundo, particularmente en aquellos con mayores niveles de desarrollo, los estudios sobre el tercer sector y su influencia en el bienestar de los ciudadanos han alcanzado creciente importancia, sobre todo en la medida en que se buscan alternativas a los mecanismos del Estado y del mercado para el logro de las metas sociales. Paralelamente, a los estudiosos de este campo les ha quedado claro que para entender la naturaleza del tercer sector, también denominado sector de la economía social o solidaria, es necesario investigar el desarrollo y características del ámbito de participación de las organizaciones civiles en la prestación de los servicios denominados privado-sociales, ya que un buen número de las acciones emprendidas por este tipo de organizaciones se orienta hacia fines asistenciales y de ayuda social. En México existen pocos estudios orientados a examinar las formas de organización y administración de las organizaciones civiles y de las instituciones asistenciales privadas, todavía en menor proporción se cuenta con estudios sobre el perfil de los recursos humanos para la prestación de los servicios que proporcionan, su relación con el tipo de actividad que desarrollan y sobre las dimensiones, particularidades e impacto del trabajo voluntario. En esas circunstancias, la escasez de análisis empíricos no permite integrar una visión global del sector, por lo que es difícil estimar su contribución al bienestar y su importancia como ámbito generador de empleo.