ALBERTO DEL CASTILLO DEL VALLE
Este libro empezó a nacer ´accidentalmente´ en un ´estacionamiento´ móvil, es decir, en un ´congestionamiento´ vehicular, en el mes de noviembre de 2010, cuando trasladándome de la Ciudad Universitaria en el Distrito Federal, hacia el centro de la ciudad de México, creé un verso en torno a los juicios orales, ante la imposibilidad de avanzar más allá de media cuadra en el transcurso del tiempo de dos semáforos en la luz roja, pensé en otros versos. Y así fueron los días siguientes, en que ante el trastorno del tránsito vehicular, creaba nuevos versos que compartía con algunos amigos, como los Profesores Universitarios Jaime Carvajal Torre. Alfredo Mora Alemán y Erasmo Palemón Alamilla Villeda. Y paulatinamente, se llenaron hojitas de papel que llevaba conmigo y en las que, en cada señalamiento de alto, escribía los versos. Al llevarlos a la computadora, aprecié que su contenido era bueno, pero en ocasiones, faltaba una explicación que, de forma versificada, era casi imposible establecer el sentido de la idea, de ahí surgió la necesidad de escribir algo en prosa, que es la segunda parte del libro.
