Sangre de mi sangre podría ser la crónica de la saga de los MacDonalds a lo largo de varias generaciones. Sin embargo, es mucho más que eso. Empleando un estilo sugestivo, el autor va entrecruzando los episodios familiares con los hechos históricos de Canadá ,el país que acoge a esta familia de emigrantes, y el fuerte sentimiento que, aún después de dos siglos, los liga a Escocia, la tierra de sus ancestros. Alistair MacLeod logra de esta manera introducimos en un mito dolorosamente bello en el cual el pasado llega incluso a pesar más que el presente. Estamos en la década de los ochenta. Alexander MacDonald visita a su hermano mayor en Toronto quien vive inmerso en el alcohol y los recuerdos. y aunque Alexander, no coincide en muchos temas con su hermano, se siente incapaz de huir y abandonarlo. A medida que avanza la novela Alexander irá descubriendo acontecimientos claves de la historia familiar que, con distintas variaciones, se repiten de generación en generación. Con una prosa austera y de notable precisión, donde cada palabra ocupa su lugar, Alistair MacLeod consigue cautivamos desde la primera página hasta el final. Alistair MacLeod es, sin duda, uno de los grandes escritores de nuestro tiempo aún por descubrir.