El gran misterio de la vida Cristiana es el misterio de la cruz de Jesús no tanto porque sea el más complicado de entender especulativamente sino porque mete en crisis hasta lo más fundamental de nuestras certezas.
¿Cómo el Padre bueno puede querer o siquiera permitir el sacrificio de Jesús, su hijo?
Siempre que un creyente reflexiona sobre este misterio desde lo profundo de su oración, lo que ella contempla puede ser para nosotros alimento.
El Sacrificio de Jesús, de José Guadalupe Treviño, MSp. S. es un ejemplo de esto.