Los seres vivos producen compuestos químicos que liberan al medio. Lo que afecta de manera significativa la biología de otros organismos y determi la existencia de interacciones químicas entre unos y otros. Así pues, todos los organismos producen señales químicas, y todos, en reciprocidad, responden a las emisiones químicas de otros organismos. En esta dinámica compleja, la ecología química encuentra su nicho particular dentro de la ciencia. Las señales producida por los organismos, son compuestos producidos a través de las vías Metabólicas secundarias, las cuales se encuentran íntimamente relaciodas con las vías primarias que dan origen a los metabolitos primarios (carbohidratos, lípidos, proteís, ácidos nucleicos ). El papel metabólico de los metabolitos secundarios es prácticamente desconocido, sin embargo, su papel ecológico se ha demostrado ampliamente. Los metabolitos secundarios son las cuerdas que enlazan a los seres vivos entre sí formando u red invisible que resulta crucial en la dinámica de los individuos, poblaciones, comunidades y ecosistemas. El mismo ser humano se encuentra conectado a esta red a través de los aromas, sabores, colores, toxis, venenos, atrayentes y repelentes que le afectan directamente o a través de los agro-ecosistemas que lo sustentan. El estudio y entendimiento de esta red ha ido avanzando paralelamente a las nuevas tecnologías que le han permitido a los químicos el aislamiento e identificación de pequeñas cantidades de metabolitos secundarios. Por otro lado, el interés de resolver ciertos problemas ecológicos urgentes, como los relaciodos con las pérdidas económicas causadas por las plagas a la agricultura, le dio un gran impulso a la ecología química. Los avances en la misma biología también han contribuido significativamente a su progreso. Las interacciones químicas son frecuentemente ´sociales ´, pues se presentan entre organismos de la misma especie que conviven en un ambiente dado. Por ello, los progresos conceptuales en la sociobiología y la biología de la conducta han sido bases importantes sobre las cuales la ecología química puede apoyar el desarrollo de su conocimiento sobre fenómenos como atracción de la pareja, selección sexual, determición de las castas y organización de la colonia entre otros, otras disciplis biológicas han sido importantes también, virtualmente, cualquier relación interespecífica mediada químicamente, sea entre depredador y presa, herbívoro y planta, parásito y hospedoro, sombionte y hospedero, entre u planta y otra, entre plantas y microorganismos, o bien, entre microorganismos y microorganismo, nos puede conducir a u interpretación evolutiva, ecológica, de biología de poblaciones, de biología molecular o bioquímica, en el más amplio sentido. Las moléculas que tienen un valor como señales químicas en la turaleza, han resultado en ocasiones benéficas para el hombre, lo antibióticos producidos por hongos, bacterias o actinomicetos, la invermecti, la ciclospori, el taxol y muchos otros compuestos, han sido descubiertos y aprovechados por la especie huma. Por esta razón, los ecólogos químicos están en posición de demostrar el valor agregado de la turaleza, es decir, que la riqueza de la biodiversidad va acompañada por la riqueza química de la misma, lo que puede significar u fuente potencial de compuestos susceptibles de ser utilizados, tal vez, como plugicidas, reguladores del crecimiento, atrayentes de polinizadores, medicis y otras drogas. ésta es la razón por la cual el ecólogo químico tiene la autoridad para hablar a favor de la conservación. Muchas especies, especialmente microbias secundarios y de invertebrados, permanecen aun sin haber sido descubiertas, esperando que su metabolitos secundarios sean investigadores. Estos seres vivos desconocidos tienen un valor potencial, biológico y químico, inmenso y merecen ser protegidos. La ecología química puede, ser de este modo, avanzar dentro de un equilibrio ´ideal ´ entre en la ciencia básica -generando información sobre los complejos y sostificados mecanismos de las relaciones químicas entre los organismos- y la ciencia aplicada ?buscando nuevos caminos que permitan la conservación y el manejo de los recursos bióticos, más adecuados y menos dañino para el ambiente.