OBRAS COMPLETAS, II. TEATRO, CRÍTICA

Las archivos de Efrén Hernández (1904-1958) debieron revisarse a finales de los años cincuenta o a principios de los sesenta por los allegados al autor, cuando se tenía conocimiento de lo que había publicado y de los que estaba escribiendo cuando lo sorprendió la muerte. Sin embargo, como Dolores Castro ha explicado, esa exploración fue un propósito incumplido por ella, dedicada a sus siete hijos, por Rosario Castellanos, que se fue a Chiapas, y por Octavio Novaro, quien se ocupaba de su empresa editorial. Por todo esto, el armando de las Obras (FCE, 1965)) no fue integro, y cuarenta años más tarde hubo que enfrentarse a un dificultoso rompecabezas, con unos papeles amarillentos que tenían, muchos de ellos, el tiempo contado. Fue necesario, además, hacer un rastreo en diarios, suplementos culturales y revistas para saber cuáles de los originales mecanográficos habían visto la luz antes o después de 1958, año de la muerte de Efrén Hernández. De esa exploración han resultado, entre otros, los hallazgos siguientes: el librero fílmico Dicha y desdichas de Nicocles Méndez. Tragiburledia cinematográfica, escrito por Mario Moreno Cantinflas y en cuya concepción participaron dolores Castro, Rosario Castellanos y Marco Antonio Millán, la pieza dramática Casi sin rozar el mundo, pensada para la actriz Maria Douglas, el conjunto de su obra crítica, a la que se agregan materiales no considerados en Bosquejos (UNAM, 1995), más ese libro de ideas y pensamientos que Efrén Hernández nombró tempranamente ´Manojo de aventuras´. Cierra este tomo con dossier crítico en el que se compilan los textos más significativos que se han escrito en torno de este personaje brillante y singular de las letras mexicanas.