Muchos de los estudios sociológicos que tratan de explicar el cambio cultural contemporáneo en América Latina suelen pasar por alto el papel central que ha desempeñado la Iglesia católica, en particular, mediante la labor y declaraciones de sus obispos, tanto como promotores y facilitadores del advenimiento de la modernidad, como por ser, en múltiples casos, sus principales detractores y obstaculizadores.áEl presente libro trata de identificar y evaluar la postura de los obispos latinoamericanos frente al advenimiento de la modernidad en la región entre 1968 y 2007. Para tal efecto se toman como fuentes primarias las declaraciones que el episcopado latinoamericano ha plasmado de manera colectiva en los documentos emanados de sus cuatro últimas asambleas generales (Medellín 1968, Puebla 1979, Santo Domingo 1992 y Aparecida 2007). Una de las virtudes que ofrecen estos documentos consiste en que, al haber sido precedidos por diversos textos preparatorios, hacen posible seguir el desarrollo de las ideas, de suerte que facilitan la construcción de una visión diacrónica y sincrónica sobre la temática en cuestión; a su vez permiten identificar, en conjunto, la pluralidad de opiniones y las tendencias dominantes entre los obispos latinoamericanos en los últimos cincuenta años.áEste estudio se lleva a cabo desde la perspectiva sociológica en diálogo con algunos de los autores que en años recientes han reflexionado acerca de la modernidad, secularización y posmodernidad en América Latina.