Cuenta la mitología griega que la música de Orfeo era tan triste cuando cantó la muerte de su esposa, que los dioses, llorando, le aconsejaron bajar al inframundo para liberarla de su fatal estado, que cantando ablandó el corazón de los demonios e hizo sollozar a los seres llamados tormentos, y que así recobró a su amada. A los gobernantes del Estado, el filósofo Platón les propuso que prepararan en tres disciplinas: música, gimnasia y filosofía. La primera, se apodera del alma y hace penetrar, en el fondo de ella, la gracia y lo hermoso, lo que permite discernir entre lo que es imperfecto y defectuoso en las obras de la naturaleza. El gobernante eucado, hará de la música su elemento y así se formará para la virtud, la gimnasia adiestra para la guerra, fortalece el cuerpo y el carácter, y el amor a la sabiduría permite distinguir entre lo bueno y lo malo, entre lo justo e injusto. Quien ama la música amará a sus semejantes, que vibran con el mismo hermoso acorde, con esa misma proporción de número y armonía. Este libro describe la vida y obra de cinco genios que han logrado, con su música, conmover nuestros espíritus hasta lo más hondo de nuestro ser, que nos han acercado, al menos momentáneamente, a unos más que a otros, a los que los sabios de la India llamaron ´nirvana´ o sea la comunión del individuo con el cosmos.