Es bíblico: quien siembra mareas va a cosechar tempestades, quien ve todo de color negro seguramente la amargura y el resentimiento lo acompañarán a donde quiera que vaya. Quien observe la vida de forma agradable, la vida como un bumerán le devolverá todo con la misma tesitura. En los matices de la felicidad integrada por los cuatro capítulos más importantes de nuestro existir: la familia, la superación, el trabajo y Dios- vivirá hermosas historias que le darán un giro inesperado a su vida, invitándolo a retomar el camino de la prosperidad, ese sendero que está destido a todos, pero que muy pocos le dan la debida trascendencia. Este es un buen momento para encontrarte a ti mismo, para disfrutar a tu familia, para alcanzar la prosperidad en el trabajo y el amor de Dios. Es un buen instante para cambiar, encontrar tu misión en la vida y darle a todos los seres que amas lo mejor de ti mismo: los matices de la felicidad.