Novena quiere decir nueve días de oración pública o privada con especial motivo a intención. Esta práctica tuvo origen en los nueve días que pasaron orando los Apóstoles con María desde la Ascensión hasta el Domingo de Pentecostés. A lo largo de los siglos, la Iglesia ha enriquecido con indulgencias muchas novenas. Además de proporcionar oraciones para obtener de Dios algún favor, facilitamos que los fieles se animen y oren con frecuencia, porque, después de los Sacramentos, la oración es la fuente más abundante de gracia de Dios. Manifestamos el amor y la unidad que son las nuestras en la Comunión de los Santos también en orando a los Santos en el cielo como nuestros patronos e intercesores con Dios. Su intercesión ante Dios es muy eficaz a causa del amor que Le han mostrado a la tierra. Al mismo tiempo, nos también compartimos de sus méritos ganados por su vida heroica.