El se burla de usted por las cuentas que no puede pagar, la gente que no puede agradar, los hábitos que no puede romper, las fallas que no puede olvidar, y un futuro que no puede enfrentar. Pero al igual que David, usted también puede enfrentar a su gigante, aun si no es el más fuerte, el más inteligente, el mejor equipado, o el más santo.
David. Usted puede leer su historia y preguntarse qué es lo que Dios vio en él. Su vida tiene poco que ofrecer al impecable santo perfecto. él cavó tantas veces como estuvo ele pie, tropezó tantas veces como conquistó. Pero para aquellos que conocen el sonido de un Goliat, David - les recuerda lo siguiente:
Enfócate en tus gigantes-Tropezarás
Enfócate en Dios-Tus gigantes caerán
¿Cuándo fue la última vez que puso una piedra en su honda y se la lanzó a su gigante? Levante sus ojos, aniquilador de gigantes. ¡El Dios que convirtió a David en un milagro está de pie, listo para convertirlo a usted en un milagro!
Si usted estás listo para hacer lo mismo, deje que esta historia lo inspire.
El mismo Dios que ayudó a David lo atudará a usted.