Este libro diversos artículos que Fernando Torre escribió entre 1980 y 1983, cuando era estudiante de Teología. Son textos que, a pesar del paso del tiempo, conservan su frescura y fuerza originales.
Varios de los artículos están dirigidos a jóvenes, pues el autor tenía entonces a su cargo una sección de la revista Pueblo sacerdotal titulada: Sólo para jóvenes.
Como él nos dice en el prólogo, escribir es una manera eficaz de anunciar el Evangelio:
Doy gracias a Dios porque durante más de veinte años me ha permitido poner por escrito mis experiencias y reflexiones, y, gracias al milagro de la imprenta, sin necesidad de desplazarme de un lugar a otro, he podido cumplir el mandato de Jesucristo: Vayan por todo el mundo y proclamen la Buena Nueva a toda la creación (Mc 16, 15)