Nuestra época no sólo se caracteriza por ser una era de globalización, también es un periodo en el que las identidades colectivas vuelven a estar en el primer plano de la esfera pública. Frente a la homogeneidad que promovieron los Estados-nación y la uniformidad que ahora impulsa el sistema global, emerge la reivindicación del pluralismo y la diversidad. Este fenómeno se expresa, entre otras cosas, en el resurgimiento de una identidad heterogénea, ya sea desde los nacionalismos, las comunidades originarias, las tradiciones religiosas o la diversidad de los movimientos migratorios. En este libro multidisciplinario se presentan, desde las humanidades, algunos aspectos relevantes de los procesos que intervienen en la construcción de las identidades.