Cuando apareció la primera edición de este libro hace doce años había un acalorado debate por reformar el cálculo. Problemas como el uso de tecnología, la relevancia del rigor y papel de una descubrimiento contra el de la práctica estaban causando profundas divisiones en departamentos de matemáticas. Desde entonces la retórica se ha calmado un poco a medida que reformistas y tradicionalistas se han dado cuenta que tienen una meta en común: hacer posible que los estudiantes entiendan y aprecien el cálculo. Las primeras tres ediciones estaban destinadas a ser una síntesis de reformas y métodos tradicionales para la enseñanza del cálculo. En esta cuarta edición continúo en ese camino destacando la comprensión de conceptos por medio de métodos visuales, verbales, numéricos y algebraicos. Pretendo llevar al estudiante el poder práctico del cálculo y la belleza intrínseca del tema.
